Erigido a mediados del siglo XVI por orden del conde Jacques de Deux-Ponts-Bitche, el Château du Hohe Weyersberg se encontraba originalmente en la colina Grünberg, en la ciudad de Mouterhouse. Luego se utilizó como pabellón de caza.
Completamente en ruinas desde finales del siglo XVI, el castillo de Hohe Weyersberg ya casi no es visible, mostrando solo los restos de una torre en el bosque.