La villa medieval de Désaignes, en pleno valle del Doux, catalogado como pueblo con carácter, le invita a descubrir los testimonios de su glorioso pasado. Después de franquear una de las tres puertas medievales, recorra las pintorescas callejuelas rodeadas de casas antiguas. A lo largo del paseo podrá contemplar la iglesia románica, las mansiones góticas, el templo protestante y el castillo del siglo XIV. El castillo, que cuenta con una escalera de caracol y chimeneas monumentales, alberga un museo dedicado a la historia local y a la vida rural de otros tiempos.