Municipio costero al oeste de Tierra Baja, el nombre de Pointe Noire procede de las rocas volcánicas que se encuentran al norte de la población. Aislada durante mucho tiempo, la capital de la madera de Guadalupe posee una gran tradición agrícola y forestal que todavía hoy continúa con sus actividades orientadas hacia el cultivo de café, la explotación forestal y el ecoturismo. Situado en un lugar llamado Les Plaines, la ineludible Casa de la Madera propone, además de su arboretum de especies tropicales, una exposición sobre las variedades y usos de la madera de la región y sobre las técnicas utilizadas por los carpinteros y ebanistas. El descubrimiento de Pointe-Noire y su patrimonio agrícola continúa con la visita de lugares como la Casa del Cacao, con su ecomuseo consagrado al cultivo y la fabricación del cacao, o la Casa Vainilla, que revela los secretos de esta célebre vaina.
Antes de dar un paseo por la localidad de Pointe-Noire, es recomendable visitar el museo del Crustáceo, con su impresionante colección de crustáceos procedentes de todo el mundo, o el parque acuícola y su cría de ouassous (un tipo de camarón de río) en un bello paraje rodeado de vegetación.
A continuación disfrute de un paseo por el pueblo para contemplar la iglesia y su fachada neoclásica, el Ayuntamiento de la década de 1930, construido por Ali Tur, el monumento policromo a los muertos y la columna republicana con el busto de Marianne.
Antes de abandonar Pointe Noire, no deje de dar un paseo por los parques de orquídeas y el bosque tropical para contemplar el salto Acomat, o realizar una escapada de relax por las agradables playas del Caribe y Pequeña Ensenada.