A oeste de la ciudad de Laon se encuentra el misterioso y majestuoso bosque de Saint-Gobain, con una superficie de 9000 hectáreas. En su interior, alberga un maravilloso patrimonio natural y arquitectónico.
Con gran variedad de especies, desde el roble al haya, pasando por el fresno y el arce, este territorio ondulado salpicado con estanques y sotobosques poblados de ciervos y corzos, es ideal para practicar el senderismo. La Oficina Nacional de Bosques ha señalizado diversos circuitos a pie y en bicicleta que parten de las rocas del Ermitage.
Ascender por el macizo de Saint-Gobain supone seguir sus agradables pistas forestales. El recorrido está plagado de tesoros arquitectónicos: abadía de Prémontré, fundada en el siglo XII por san Norberto y reconstruida en el siglo XVIII, cuyos soberbios edificios acogen en la actualidad un centro hospitalario; vestigios de la antigua abadía benedictina de Saint-Nicolas-aux-Bois; priorato fortificado de Le Tortoir (siglo XIV). Parcialmente abierta al público, la abadía de los premonstratenses permite ver sus jardines, su capilla y su escalera monumental.