Ciudad histórico-artística, capital de los vinos de Borgoña, la ciudad de Beaune, a 40 de kilómetros al sur de Dijon, posee un patrimonio excepcional. Rodeada de antiguas murallas, está considerada el centro del negocio de los vinos borgoñones, como revela la famosa subasta de los Hospicios de Beaune que se celebra el tercer domingo de noviembre.
El casco viejo alberga destacados monumentos y muestra a los visitantes bellos palacios renacentistas, bonitas casas con entramado y preciosos patios interiores. Dese un paseo por estas calles para descubrir a su ritmo o con una audioguía los tesoros arquitectónicos de Beaune.
Primera etapa: el Hospital, joya de la arquitectura medieval borgoñona, edificado en el siglo XV por encargo de Nicolas Rolin, canciller del duque de Borgoña, para ayudar a los enfermos más desfavorecidos. Declarado Monumento Histórico, este magnífico conjunto, con sus famosos tejados con tejas barnizadas, se ha convertido en museo de historia de la medicina. Durante la visita, también podrá contemplar, entre otras cosas, el magnífico patio de honor, la impresionante sala de los Pôvres, la capilla gótica, la cocina o la botica, así como una obra maestra de la pintura flamenca del siglo XV: el políptico del Juicio Final, atribuido al artista Rogier van der Weyden. Aquí, en noviembre se celebra la mayor subasta de vinos del mundo, una parte de cuyos ingresos se dedica al mantenimiento del Hospicio.
Cerca de allí, en la calle Paradis, podrá visitar el palacio de los duques de Borgoña. Declarado Monumento Histórico, este antiguo palacio ducal del siglo XIV alberga actualmente el museo del Vino de Borgoña. En él se ilustra la historia del viñedo y de la fabricación del vino mediante colecciones etnográficas y artísticas, tapices y objetos cotidianos de la técnica de los viñadores.
En toda la región de Beaune, visitas de bodegas, degustaciones y excursiones organizadas a los viñedos permiten conocer el patrimonio vitícola de Borgoña.
Otro monumento ineludible es la colegiata de Nuestra Señora, de inspiración cluniacense. Este magnífico edificio del siglo XIII, una de las últimas grandes iglesias románicas de Borgoña, posee una portada y una cabecera góticas y un campanario renacentista. El interior alberga una colección de cinco tapices que ilustran la vida de la Virgen (siglo XV), una capilla renacentista y una Virgen negra (siglo XII).
La vida cultural de Beaune es rica y abarca todo el año. Aquí se celebra uno de los más prestigiosos festivales de música barroca de Europa en el mes de julio.
En verano, las Lumières de Beaune permiten ver las proyecciones monumentales en los monumentos y lugares destacados de la ciudad como el Hospital, la colegiata, el museo del Vino, la capilla de San Esteban, el campanario, la muralla de las Damas y la puerta María de Borgoña.