En el corazón de Le Morvan, en las pendientes de una colina arbolada situada frente a la colina de Vézelay, se alza la imponente silueta del castillo de Bazoches. Construido en el siglo XII por el señor Jean de Bazoches, este edificio feudal de forma trapezoidal, compuesto por cuatro torres redondas y un torreón cuadrado que rodean un patio interior, sobresale por haber sido la residencia del mariscal de Vauban en el siglo XVII. En este lugar, bajo el reinado de Luis XIV, el ilustre ingeniero realizó los estudios y los planos de más de trescientas obras y plazas fuertes del reino de Francia. Actualmente, la finca de Bazoches es propiedad de los descendientes de Vauban, y está abierta al público desde finales de marzo a principios de noviembre. La visita permite descubrir su rico mobiliario y numerosos recuerdos relacionados con el famoso arquitecto militar. El dormitorio y el despacho de Vauban, el dormitorio de la mariscala, la gran galería en la que antiguamente trabajaban ingenieros y diseñadores, los salones y las bibliotecas son algunos de los testimonios del pasado que se pueden contemplar en este lugar.
Por debajo del castillo, el precioso pequeño pueblo de Bazoches alberga en su iglesia (siglos XII a XVI) la tumba del mariscal de Vauban. Dotada de una buena acústica, la iglesia de San Hilario acoge todos los años, a mediados de julio, las Noches Musicales de Bazoches, un festival dedicado al canto lírico.
