Sabroso y delicado, el gratinado de christophine es un plato muy apreciado por los antillanos. La chayotte, denominada christophine en las Antillas francesas y en Guyana o chouchou en Reunión, es una gran baya verde o blanca, con forma de pera alargada, cuyo sabor recuerda al calabacín y a la patata. Esta fruta de la familia de las cucurbitáceas posee muchas virtudes, pues no solo tiene mucha agua –por lo que es poco calórica-, sino que también es rica en vitamina C y B9 y en oligoelementos
La christophine no solo está deliciosa en ensalada o en puré, sino también gratinada. Para prepararla, se cuecen primero las chayottes con agua o al vapor. Una vez preparadas, se extrae la carne y se aplasta antes de añadir un poco de mezcla de cuatro especias, cebolla del país, crema fresca, ajo y sal. Luego, se cubre la preparación con queso rallado antes de meterla en el horno a gratinar. Según los gustos, se pueden añadir a la receta torreznos, besamel o pan duro.