Chicon es el nombre que se da a la endivia en el Norte de Francia. Se trata de una variedad de achicoria amarga, blanca y con los bordes amarillos. El chicon, que se consume crudo o cocido, se conserva varios días en el cajón de las verduras del frigorífico. Esta verdura de invierno se toma en ensalada, como aperitivo, en sopa, en quiche, gratinada con jamón y besamel, o braseada con carne.
El chicon fue descubierto por casualidad a mediados del siglo XIX por un campesino belga que había guardado unas plantas de achicoria salvaje en el fondo de una bodega muy oscura. De estas plantaciones surgió la endivia, una verdura completamente desconocida hasta el momento.
Es muy apreciada por las personas que desean adelgazar, ya que el chicon es uno de los alimentos con menor valor energético. Rico en fibras, es soportada por los intestinos frágiles, y aporta una gran cantidad de vitamina C y potasio.
En la actualidad, Norte-Paso de Calais acoge el 83% de la producción francesa de chicon y el 50 % de la producción mundial. Todos los años, a finales de febrero, se celebra una fiesta de la endivia en Haisnes, en Paso de Calais.