La encantadora y pequeña ciudad de Bas-Rhin, Alsacia, Still tiene lugar a unos treinta kilómetros de Estrasburgo y su catedral, a orillas del Stillbach. Se encuentra en el corazón del valle de Bruche, cerca de Molsheim, Mollkirch y Flexbourg.
El llamado Stilla o Stille toma su nombre del flujo que lo atraviesa. El sitio atrae rápidamente a muchos habitantes, incluyendo su arcilla, propicio para la creación de ladrillos, azulejos o cerámica. Muchos vestigios merovingios fueron encontrados en el lugar, lo que demuestra una antigua ocupación humana en el territorio.
Propiedad del obispado de Estrasburgo hasta la Revolución Francesa, Still es hoy un importante sitio turístico gracias a su importante patrimonio arquitectónico.