Apreciado en otro tiempo por los reyes de Francia, Loir y Cher atrae en la actualidad a los visitantes de todo el mundo con su rico patrimonio histórico, arquitectónico y artístico. La ciudad de Blois, con su soberbia herencia a orillas del río real, los célebres castillos del valle de Loira, como el de Chambord o el de Cheverny, el valle del Loir y sus edificios religiosos, que albergan espléndidas pinturas murales, o Sologne y sus paisajes salvajes. Todas estas bazas hacen de Loir y Cher un destino imprescindible repleto de propuestas.