Majestuosamente emplazada en un promontorio rocoso, encima de un meandro del río Vézère, la bonita ciudad de Uzerche le invita a un fabuloso viaje por su patrimonio histórico.
Uzerche fue una fortaleza inexpugnable, situada en la frontera entre el Alto y el Bajo Lemosín. En la época carolingia y la Edad Media desempeñó un importante papel gracias a su posición estratégica y a sus imponentes fortificaciones. De hecho, era conocida como "Uzerche la virgen", pues nadie logró conquistarla jamás.
Poseedora de un conjunto arquitectónico muy destacado, la villa medieval, también conocida como la Perla de Lemosín, es objeto de un recorrido cultural organizado por la Oficina de Turismo. Esta visita a pie, jalonada por paneles informativos, le descubrirá las casas antiguas, las majestuosas torres y los pintorescos pasajes abovedados de la ciudad. A lo largo del paseo podrá descubrir, entre otras cosas, el castillo Bécharie, conjunto defensivo del siglo XV remodelado en los siglos XVI y XVII e inscrito en la lista de monumentos históricos, así como una puerta de la antigua muralla fortificada, llamada la puerta de Bécharie. Otro edificio importante del recorrido es la iglesia abacial de San Pedro, joya del arte románico lemosino, que fue fortificada durante la guerra de los Cien Años, y cuyo coro del deambulatorio está decorado con capiteles cubiertos de motivos vegetales. Su cripta del siglo XI, una de las más antiguas de Lemosín, tiene el mismo tamaño del coro, el deambulatorio y las capillas. No muy lejos de allí, en la plaza de los Viñadores, se encuentra la Torre del Príncipe Negro (siglo XII), abierta al público. Paseando por los callejones típicos de Uzerche podrá contemplar bellos edificios, como el castillo Tayac, la casa Eyssartier, el palacio de Chavailles, el castillo Pontier o una antigua casa con entramado de madera en la calle Pierre Chalaud. Y si desea descansar un poco, diríjase a la acogedora explanada de Lunade, que cuenta con bancos para sentarse y ofrece unas bonitas vistas del río Vézère y de las colinas que lo rodean.
El escenario natural, omnipresente en la pintoresca Uzerche, se manifiesta también en sus jardines aterrazados, rodeados de muros y adornados con flores y huertos. Situado bajo la famosa puerta de Bécharie y abierto al público, el jardín del mismo nombre ofrece un agradable zona verde, ideal para contemplar el patrimonio de Uzerche desde otro ángulo.
