En Indre y Loira existe una ciudad histórica del mismo nombre que el hombre que la inspiró: Richelieu. El rey Luis XIII la hizo construir en el siglo XVII para su ilustre ministro. Atraviese una de las tres monumentales puertas, rodeadas de murallas y fosos para llegar hasta la Grande Rue (Calle Mayor). Con 12 metros de ancho y rodeada de numerosos palacios, viene a ser como el cardenal Richelieu: imponente. En cada extremo hay dos plazas cuadradas simétricas. Continúe su visita por el Museo de Arte e Historia, donde se exhiben recuerdos, muebles y tapices del cardenal. De la misma forma, el espacio Richelieu, mediante una escenografía interactiva, le permite aprender más de este poderoso personaje. Termine su visita en el agradable parque arbolado, que cuenta con una rosaleda repleta de seductores aromas.
Cada dos años, en julio, actores vestidos de época reviven los tiempos en los que vivió el cardenal en el marco del festival Capa y Espada.
¿Y por qué no deja el coche para llegar a Chinon por la ruta verde? Una forma de descubrir los paisajes de alrededor en un agradable paseo a pie o en bicicleta.