Situada al oeste del famoso cabo de Antibes, la localidad playera de Juan-les-Pins refleja el agradable ambiente de la Riviera. Esta pequeña y popular ciudad de la Costa Azul alberga muchos edificios de lujo. Palacios, villas y hoteles de lujo se extienden frente al mar y de sus jardines emanan unos deliciosos efluvios provenzales. Todavía se aprecia lo que debió ser un inmenso bosque de pinos que bordeaba las playas de arena fina antes de transformarse en una localidad playera mítica frecuentada por la flor y nata artística a lo largo de los años. En la actualidad, todavía es posible disfrutar de sus hermosas playas de arena rubia o de la intimidad de sus encantadoras calitas.
Evidentemente, hay que sumergirse en el frenesí de Juan-les-Pins: discotecas, casino y tiendas nocturnas lo convierten en un paraíso para los noctámbulos que se congregan en los bares situados junto al mar.
Además de su ambiente electrizante, Juan-les-Pins acoge un evento musical que da aún más brillo a su imagen de ciudad festiva. Desde que terminó la Segunda Guerra Mundial, la ciudad se ha convertido en la gran cita del jazz, por donde han pasado ilustres artistas como Sidney Bechet, Ella Fitzgerald o Duke Ellington. Todavía hoy, los nombres más importantes del jazz vienen a actuar en el mes de julio durante el festival Jazz à Juan en la Pineda Gould.
Para alejarse un poco de la efervescencia de Juan-les-Pins, haga un alto en el parque Exflora, que se extiende sobre casi 5 hectáreas. Alberga alrededor de 330 especies vegetales distribuidas en torno a un gran olivar. Aquí se manifiestan brillantemente los diferentes estilos de jardines, que van desde la Roma antigua a la Riviera del siglo XIX. No deje de ver el inmenso camino de agua de 500 metros de longitud que va hasta el mar y está rodeado de magníficos rosales.