En el antiguo granero totalmente renovado, la familia Peres creó 5 habitaciones con un ambiente cálido, gracias a la alianza orquestada de madera (álamo, roble, aliso, arce, de los bosques locales) y colores brillantes eligen sabiamente. Sus nombres de frutas se refieren a la plantación de diversas especies que revisten los pastizales.
Todas las habitaciones disponen de aire acondicionado y baño privado con ducha y WC. Podrá disfrutar de nuestra mesa de la cena de la noche en la reserva y así degustar los productos agrícolas producidos localmente.
Para prolongar el placer, disfrutar de la piscina privada durante las horas más calurosas del día y petanca. Las canchas de tenis en el pueblo para los amantes de la bola amarilla. Para los amantes del senderismo, varios senderos señalizados permiten descubrir nuestro auténtico campo.